“Cree en algo. Incluso si eso implica sacrificarlo todo”. Con ese eslogan, Nike convirtió a Colin Kaepernick en algo más que un símbolo del activismo. La compañía hizo del ex quarterback de la NFL un nuevo ícono comercial aprovechando la ola de empoderamiento de los atletas y, ahora, dicho spot ha sido premiado con un Emmy por la industria de la televisión estadounidense.

La campaña Dream Crazy, protagonizada por Kaepernick junto a LeBron James, Serena Williams, las futbolistas del equipo estadounidense y otros deportistas, pretendía exprimir los valores de sus atletas patrocinados como principal reclamo para conectar con sus consumidores. Según Nike, los stocks de la compañía aumentaron un 5% en las semanas posteriores a su lanzamiento, uno de los principales indicadores del alcance potencial que tuvo a escala mundial.

Esta campaña, creada junto a Wieden + Kennedy, estuvo enmarcada dentro del 30 aniversario de la marca 'Just Do it'. Desde la compañía se excusaron hablando del sentido inspirador de la campaña que también fue criticada por el Presidente Donald Trump. Si bien empezó con un conflicto entre la marca y una parte de ciudadanos nacionalistas con un boicot contra la compañía de Oregon, inclusive con caídas en Wall Street, la campaña pudo mantener un ROI considerable que lo llevó a generar más utilidades de lo previsto. No solo se llevaron este Emmy sino también el Gold Lion en el Festival de Cannes, la mayor premiación a la publicidad en el mundo.

Nike consiguió aumentar sus números en miles a raíz del anuncio publicado en 2018. Además, no fue el único de la serie. Incluso se creó otro enmarcado dentro de la Copa Mundial Femenina. Aquí el caso de estudio.

Recientemente, Nike también ha inaugurado un edificio para que el equipo de innovación trabaje en la mejora de sus productos. El proyecto, que forma parte de la renovación de la sede central de la empresa, rendirá homenaje a LeBron James, que pondrá su nombre a dicho complejo.